Plantas tóxicas para los conejos
Para aquellos que disponemos de jardín en casa donde sacar a pasear a nuestro conejito, nos encanta verlo correr y saltar por la hierva. Pero en una casa doméstica, ya sea en el jardín como en el interior, suelen haber plantas o hierbas a las cuales nuestro amigo se acercará y seguramente olerá o incluso morderá.
Por ello, es importante saber cuales son algunas de las plantas más comunes en nuestros jardines e interiores, y que son plantas tóxicas para los conejos.
Acebo: (Mucho cuidado en época Navideña puesto que es una planta muy típica en esta época del año) Tanto las hojas como los frutos y semillas de acebo son venenosos. Los síntomas tras ingerir una dosis mínima de frutos (dos serían suficientes), son:
– trastornos gastrointestinales con fuertes diarreas y vómitos
– dolor abdominal, somnolencia y malestar general.
Una dosis superior, -y siempre dependiendo del tamaño del animal y de la cantidad ingerida-, provocaría deshidratación a consecuencia de las diarreas y vómitos, shock, coma y muerte.
Flor de Pascua: Al igual que el acebo, es una planta muy típica de Navidad, especial cuidado al traer una a casa).Todas las partes de la planta son tóxicas, en especial el látex que circula por su interior. El contacto directo con el látex de la planta puede provocar:
– dermatitis con irritaciones, prurito o picor, edema e incluso aparición de vesículas o ampollas.
Los síntomas tras su ingestión son:
– trastornos gastrointestinales con vómitos, diarreas, dolor abdominal, irritación de las mucosas y salivación abundante.
– el contacto directo del látex de la planta con los ojos del conejito puede provocar trastornos oculares más o menos graves según sea la dosis.
Muérdago: También muy extendida en Navidad. Los frutos del muérdago son relativamente tóxicos, es necesario ingerir dosis muy elevadas para provocar trastornos importantes. Los síntomas tras ingestión de frutos de muérdago son:
– trastornos gastrointestinales con vómitos, diarreas, irritación y dolor abdominal
– midriasis o dilatación de las pupilas
– salivación abundante y sed excesiva.
Los síntomas más preocupantes son los cardiocirculatorios o neurológicos con:
– asfixia
– dificultad respiratoria
– taquicardia o aumento de la frecuencia cardíaca
– falta de coordinación
– convulsiones, parálisis, coma y, en casos extremos debidos a una sobredosis, muerte por parada cardíaca.
Adelfa: Todas las partes de la adelfa son altamente tóxicas. Los síntomas tras ingerir adelfa, siempre dependiendo de la dosis y del tamaño del animal, son:
– trastornos gastrointestinales con vómitos, diarreas, irritación y dolor abdominal
– somnolencia con depresión del sistema nervioso central, fiebre, trastornos cardíacos con taquicardia o aumento de las contracciones del corazón y arritmias
– disnea o dificultad respiratoria
– debilidad, coma y muerte por paro cardíaco.
Amarilis: Al igual que la gran mayoría de plantas bulbosas, los bulbos de amarilis son altamente tóxicos. Los síntomas tras la ingestión de bulbos de amarilis son:
– trastornos gastrointestinales con vómitos, fuertes diarreas, dolor abdominal y malestar general
– falta de coordinación, trastornos cardíacos y en casos extremos y debido a una sobredosis, muerte del afectado.
Acónito: Es una planta altamente tóxica cuyo veneno hace efecto incluso simplemente con el contacto con la piel.
Aguacate: La ingesta de las hojas provoca mastitis en la mayoría de casos (algunas variedades son mas tóxicas que otras, algunas los matan y otros no causan reacción), la corteza tiene el mismo efecto que las hojas.
El hueso del aguacate es lo más peligroso, pues al igual que el resto de huesos frutales contiene cianuro, pero el aguacate tiene dosis especialmente altas de cianuro.
Hiedra: Todas las partes de la planta son ligeramente tóxicas a excepción de los frutos, los cuales son de una toxicidad extrema. El contacto directo con la hiedra, debido a los pelos que recubren la planta y al jugo que se encuentra en su interior, puede provocar:
– dermatitis con irritaciones
– erupciones cutáneas e incluso aparición de ampollas y úlceras.
Los síntomas tras la ingestión de la hiedra son:
– trastornos gastrointestinales con vómitos, diarreas y malestar general
– fiebre
– espasmos musculares
– excitabilidad, bradicardia o disminución de la frecuencia cardíaca
– dependiendo de la dosis ingerida y del tamaño del animal, coma.
En casos extremos, se puede dar la muerte por asfixia con parada respiratoria.
Lirio: Los síntomas tras la ingestión son:
– trastornos gastrointestinales con vómitos, abundantes diarreas, dolor abdominal, irritación y malestar general e hipertensión.
Narciso: Existen varias especies de narcisos y todas ellas son tóxicas en todas sus partes (en especial los bulbos). El contacto directo con el jugo de la planta podría provocar dermatitis e irritaciones. Los síntomas tras la ingestión de la planta son:
– trastornos gastrointestinales con violentos vómitos, diarreas,
dolor abdominal e inflamación
– salivación excesiva, convulsiones, trastornos cardíacos
– en casos extremos, muerte del afectado.
Difenbaquia: Todas las partes de la planta son tóxicas (el látex blanco que circula por su interior es nocivo e irritante), en especial las hojas y el tallo. El contacto directo con la planta puede provocar:
– dermatitis con irritación, enrojecimiento, inflamación y en ocasiones aparición de vesículas o ampollas.
Los síntomas tras la ingestión de Difenbaquia son inmediatos y por tal motivo, lo más frecuente es que el animal deje de ingerirla. De todos modos, los síntomas que puede sufrir son:
– ardor bucal, inflamación, dolor intenso, salivación excesiva, dificultad para deglutir, edema o hinchazón de cuello, esófago, estómago e intestinos, vómitos
– disnea o dificultad para respirar
– en casos excepcionales, dependiendo de la cantidad ingerida y del peso del animal, muerte de la víctima por asfixia.
Filodendro: Existen varias especies que pertenecen algénero Philodendron, siendo todas y en todas sus partes, tóxicas. Los síntomas después de masticar el filodendro son inmediatos: ardor bucal, dolor agudo, salivación excesiva y edema o hinchazón de lengua y faringe con dificultad para respirar. Si se llegase a producir su ingestión, los síntomas se pueden agravar con edema de esófago, estómago e intestinos, vómitos, asfixia y en casos extremos, muerte del afectado. Tras la ingestión del filodendro, presentan un cuadro clínico bastante preocupante con trastornos renales, agresividad, convulsiones y en algunas ocasiones encefalitis o inflamación del encéfalo con debilidad muscular y parálisis.
Potos: Sólo el masticarla puede provocar irritaciones varias, tanto en el paladar, lengua, etc., como en todas aquellas zonas donde llegue a establecer contacto. Los síntomas tras la ingestión de la planta son:
– graves trastornos del aparato digestivo, produciendo fuertes y frecuentes vómitos.
Hay otras plantas con las que hay que tener especial cuidado con nuestros conejitos como las margaritas, los geranios, el aloe vera, los gladiolos, helechos, jacintos, las orquídeas, solanáceas, prímulas, ficus, falsas acacias, esparragueras, enebros, claveles, cactus…
Una tarde en el jardín puede ser muy divertida, pero siempre tomando precauciones.