Relación entre animales
Esta mañana vi un vídeo que me sorprendió mucho, aunque a la vez me hizo pensar en lo más bonito y tierno de los animales, la buena relación que puede haber entre animales tan distintos como entre perros y gatos, gatos con ratones, periquitos con gatos… y así una infinidad de combinaciones asombrosas.
Y es que hay casos realmente sorprendentes como por ejemplo el que tengo en casa… Hulk, nuestro bóxer de 40kg enorme y fuerte, adora a Apache, un conejo que no llega a los 2kg y al que además le encanta tumbarse al lado de Hulk.
La relación de estos dos me dejó flipada desde el primer día, porque nunca, en los cuatro años que hace que conviven, ha habido ningún amago o gesto amenazador por parte de Hulk.
Apache tampoco se queda corto, porque cuando está junto a Hulk le lame, se sube a su lomo y le hace todo tipo de monerías, es un amor mutuo el que se tienen.
Apache aquí tenía 6 meses y Hulk era un cachorrón de apenas 4!!
Aunque Hulk, aquí donde le veis, no es ningún bonachón tontorrón.
Una vez nos cruzamos con un gato por la montaña y nos asustamos mucho porque solo escuchábamos ladridos, gruñidos y gritos de entre los matorrales. Cuando al fin conseguimos que Hulk volviera llegó lleno de arañazos y con la lengua sangrando.
Hulk debe de tener alguna psico-manía-persecutoria con los gatos. Los odia a muerte!!
Por suerte el gato escapó pero, lamentablemente nunca llegamos a saber en qué condiciones…
Yo tengo una teoría y es que como vivimos en una urbanización, está lleno de gatitos callejeros. Durante el primer año de estar en casa, cuando llegaba la noche, los gatos se colaban dentro de la parcela y le robaban el pienso del comedero. Seguro que teníamos el récord de gatos más gordos del planeta!!
A partir del segundo año, cuando Hulk creció, ya no había gato que se acercara, aprendió a defender su comida. Solo ver pasar uno, se pone como loco y empieza a ladrar, gruñir y a correr como un loco.
A Misha, la gata siamesa de la vecina la tiene aterrorizada, ya ni se asoma a la valla.
Peeeero después de todo esto tenemos un polo opuesto… Django (el cachorro de Jack Russell) que si pudiera cogería a Apache y lo dejaría a punto para meterlo en la cazuela.
Cuando lo ve lo quiere perseguir, morder y quien sabe que otras ideas se le pasan por la cabeza…
Al principio intentamos que se llevaran bien, pero tras arrancarle algún que otro mechón de pelo ya tuvimos que tomar medidas. No es que Apache se amedrente, porque se le encara y gruñe, pero muy a mi pesar tiene las de perder. Y por supuesto que nosotros no vamos a dejar que se hagan daño.
Aunque no lo hemos dejado por imposible, hemos trazado un plan de amiguismo, los iremos presentando poco a poco en terreno neutral, bajo supervisión y a ver si poco a poco se llevan mejor.
Ahora, a los gatos ni los mira, claro como a él no le han robado nunca el pienso…
Pero esta es la magia de los animales! sorprendente cuando lo vemos y adorable cuando lo vivimos. Un ejemplo de convivencia que muchos humanos deberían aprender.
Si tenéis historias sorprendentes como éstas y queréis compartirlas, o estáis pensando en traer a casa una nueva mascota muy diferente a otra que ya tenéis, comentadlo y seguro que entre todos os daremos los mejores consejos para que puedan tener una buena convivencia.