Como debe ser una caseta de perro

Muchas veces nos hemos encontrado que estamos buscando la caseta ideal para nuestro perro, que sea cálida, resistente, bonita, duradera y sobre todo y lo más importante que sea barata.

En cuanto al precio desde luego no hay mucho margen, a no ser que busquemos en el mercado de la segunda mano, que en este caso sí nos ofrece grandes ofertas.

En cuanto a lo demás hay aspectos que son muy sencillos de tener en cuenta y que harán que al final hayamos elegido la mejor caseta para nuestro perro.

En casa, cuando Hulk (nuestro Bóxer) alcanzó su primer año y por su tamaño ya era más cómodo para todos él que tuviera su propio espacio y, lo más importante, que no dependiera de nosotros para salir a hacer sus «cosas», empezó el dilema de cómo debe ser una caseta de perro y cual sería la caseta perfecta.

Como cualquier inexperto en la materia, fuimos dando tumbos de un lado a otro, de una idea a otra, sin tener muy claro cuales eran las cuatro reglas generales que debíamos tener en cuenta. Pero tras bucear bastante en el tema nos dimos cuenta de cuales eran:

1. Durabilidad o calidad
2. Distribución del espacio
3. Adaptación a la climatología o aislamiento térmico
4. Higiene

Pues bien, visto esto veamos qué debemos tener en cuenta en cada aspecto. No obstante, si preferís ver directamente algunas de las mejores casetas que se pueden encontrar en el mercado a día de hoy, os recomiendo que le echéis un vistazo a esta selección de casetas para perros.

1. Durabilidad o calidad (material)

El material con el que esté fabricada la caseta debe ser resistente a la intemperie y a la climatología adversa, pensemos que nuestro perro va ha pasar muchas horas dentro, y muchas de las cuales serán por la noche, cuando el frío y la lluvia generalmente son más intensos, por tanto el material con el que esté construida deberá ofrecerle las mayores garantías de calidad y calidez.

* Para casetas de madera uno de los mejores materiales es la madera de abeto, generalmente ya viene tratada de fábrica, pero de no ser así siempre podremos darle una mano de barniz que la nutra y la deje preparada para unos cuantos años a la intemperie.

El grosor de los paneles nunca debe ser inferior a 1cm, de lo contrario se podría quebrar con un movimiento brusco del animal

* Para casetas de PVC o plástico, es algo más sencillo, puesto que en su mayoría los materiales son muy resistentes y por tanto la vida del producto se alarga sin tener que realizar casi mantenimiento.

2. Distribución del espacio

La distribución del espacio puede parecer un tema trivial, pero muy lejos de eso es algo muy a tener en cuenta. Si nos hemos fijado alguna vez hay casetas que tienen una entrada frontal simétrica, es decir, la puerta está totalmente centrada en la pared frontal, y luego hay modelos que la tienen un poco desplazada. Al desplazar la entrada hacia un lado, permitimos dejar un hueco en su interior donde nuestro peludo puede resguardarse mejor del viento y de la lluvia que pudiera entrar en días muy ventosos. De esta manera evitamos tanto el frío intenso como el que pueda mojarse.

Si tenemos la posibilidad de escoger, la entrada quede algo desplazada hacia un lateral, nuestra mascota nos lo agradecerá

Dentro del espacio, un aspecto muy a tener en cuenta, es escoger bien el tamaño de la caseta. Casi todos los modelos cuentan con una tabla en la que nos indica cual es el tamaño adecuado según la raza del perro. Y esto es porque una caseta demasiado pequeña sería incómoda para moverse, y una demasiado grande dejaría escapar el calor corporal y por tanto nunca alcanzaría un ambiente cálido en su interior.

Siempre escogeremos el tamaño adecuado para la talla de nuestro peludo

Y por último el techo, éste siempre debe tener una caída o pendiente, ya sea hacia un lado, hacia los dos o hacia atrás.

Lo más cómodo es o a dos aguas o hacia un lado

Con un techo raso, el agua no cogería pendiente y podría llegar a filtrar, pero si la pendiente es hacia delante el agua caería toda sobre la entrada.

3. Adaptación a la climatología o aislamiento térmico

El aislamiento térmico es uno de los puntos más importantes además de la calidad, en realidad van muy de la mano, ya que una caseta de calidad por lo general nos dará buenos resultados en cuanto al aislamiento térmico.

Las casetas de madera, siempre que estén fabricadas con una buena madera como es la de abeto y sus paredes tengan un grosor mínimo de 1cm, nos estarán ofreciendo uno de los mejores aislamientos térmicos. Ya llueva o nieve, en su interior habrá un ambiente cálido, y por contra en verano será fresca y aireada. Estas son las ventajas de una buena caseta de madera.

En el caso de las casetas de PVC, lamentablemente no son las más indicadas, puesto que en invierno son muy difíciles de caldear y en verano son verdaderos hornos, de modo que yo no las aconsejo en ningún caso para aquellos lugares donde las temperaturas no sean moderadas.

4. Higiene

La higiene es algo muy importante en las casetas, ya que generalmente están expuestas a insectos que anidan fácilmente en su interior. De modo que es aconsejable, sobretodo en los meses más cálidos del año, como la primavera y el verano, el realizar una limpieza o inspección por lo menos una vez al mes.

Para facilitarnos esa tarea, en las casetas de madera se han realizado grandes avances, ya que son las más propensas a acoger bichos. Y la idea es hacer techos abatibles, los cuales nos permiten levantar cómodamente el techo, inspeccionar en busca de arañas, pulgas u otros bichos y limpiar fácilmente.

La caseta Woody (Zooplus) es comodísima por su apertura superior

Un buen manguerazo de vez en cuando y una capa de barniz nos ayudará a mantener nuestra caseta libre de estos molestos bichos.

Y esto es todo, espero haber aclarado algunas dudas y que a partir de ahora la elección de una caseta para nuestra masctoa no sea tan complicada.